Este año la elección de los legisladores porteños no será una elección más. Tendrá dos particularidades que presentan nuevos desafíos y oportunidades al progresismo porteño.

Por un lado, las elecciones serán en fecha distinta a las nacionales. Más allá de las razones que motivaron al Jefe de Gobierno a desdoblar las elecciones -ligado, en esta oportunidad, al fracaso del buscado acuerdo electoral entre el PRO y la Libertad Avanza- creemos, como lo señalamos en varias oportunidades, que es una buena medida que abre la posibilidad de discutir los problemas específicos de nuestra ciudad por fuera de la agenda de los problemas nacionales. Esto es urgente porque tras 18 años de gestión del PRO y de haber librado a las fuerzas del mercado el diseño de la Ciudad de Buenos Aires, urge debatir si este modelo de ciudad es compatible con la calidad de vida que necesitamos y queremos los y las porteñas.

Leé la nota completa de Damián Jaimovich en Tiempo Argentino.